La apnea del sueño, que significa dormir sin respiración, es un trastorno muy común en el cual la respiración se interrumpe o se hace muy superficial. Puede ocurrir un cese completo de la señal respiratoria de al menos 20 segundos de duración, lo que puede causar un colapso en las vías respiratorias o una obstrucción de las mismas durante el sueño, y cuando la respiración vuelve a aparecer, lo hace como un ronquido o un resoplido.
De tal manera que, la mayoría de las personas con apnea roncan de manera muy fuerte, sin embargo, no todas las personas que roncan tienen por qué tener apnea.
Las principales causas de la apnea y sus síntomas más comunes
La mayor parte de las apneas no tienen unas causas únicas, sino que aparecen por un conglomerado de diferentes motivos. Sin embargo, se han identificado dos causas principales de la apnea del sueño.
La apnea obstructiva del sueño, se produce durante los periodos de sueños en los cuales se relajan los músculos faciales, cae la mandíbula y retrocede la lengua, lo que estrecha y obstruye la vía aérea, provocando dificultades respiratorias. Siendo los ronquidos y los resoplidos el síntoma principal de estar padeciendo este tipo de apnea. El sobrepeso, los pólipos nasales, una amígdalas que han aumentado de tamaño o dormir boca arriba son todos factores de riesgo que contribuyen a desarrollar la apnea del sueño. La apnea central del sueño, esta es menos frecuente, destaca por no presentar obstrucción de las vía respiratorias, sino por la ausencia de la señal respiratoria y del esfuerzo respiratorio, ya que el sistema nervioso deja de enviar estímulos a los músculos receptores.
Entre los principales síntomas que presenta una persona con apnea destacan la fatiga crónica, dolor de cabeza por las mañanas, dificultades para la concentración, depresión o disfunción eréctil. La apnea del sueño puede ser diagnosticada por un examen clínico en el que se observe el aumento de la producción de glóbulo rojos, causado por la falta de oxígeno que se produce durante el sueño.
El mejor tratamiento para la apnea, llevar un estilo de vida saludable
No existe un tratamiento específico para la apnea, pero si se pueden seguir recomendaciones de una vida saludable que hagan mitigar los efectos negativos de este trastorno del sueño. Como, por ejemplo, evitar el consumo de alcohol, establecer una buena rutina de sueño, no dormir boca arriba y mantener un peso saludable, ya que el sobrepeso está directamente relacionado con el desarrollo de la apnea.
Dependiendo del estado de la apnea en cada persona, se pueden tomar otras medidas para tratar esta enfermedad, como la cirugía, mediante la cual se extirpan las obstrucciones respiratorias como las amígdalas o los pólipos nasales, el uso de un Dispositivo de Avance Mandibular, mejorando la respiración por la noche si el origen de la apnea se da por la obstrucción en la base de la lengua, o un Dispositivo de Presión Aérea Positiva Continua, una mascarilla mediante la cual se inyecta aire a presión para eliminar el bloqueo y garantizar el paso del aire.
