Consumir miel de abeja conlleva beneficios poco conocidos para la salud de las personas. Sin embargo, debes asegurarte para esto que la misma contenga una pureza adecuada para lograr que mantengan todos los niveles de enzimas y antioxidantes que provienen de su estado natural. Si no conoces con detalle las propiedades y beneficios de este superalimento, aquí te los decimos todos.
Propiedades de la miel de abeja
Conocer las propiedades con las que cuenta este fluido nos ayudará a reconocer con mayor facilidad los beneficios. Veamos a continuación:
En su composición se encuentran unas siete vitaminas: A, E, K, B1, B2, B6 y C. Además, contiene minerales como el manganeso, calcio, cobre, zinc, entre otros. Dispone de antioxidantes que trabajan con mucha eficiencia en el cuidado de órganos y sistemas, como los fenólicos y los flavonoides. Puede ser muy útil en la cocina, pero también funciona como ingrediente de alto valor para medicamentos de origen natural, productos cosméticos, entre otros.
Beneficios de la miel de abeja
Vistas ya sus propiedades podemos establecer, entonces, los más destacados beneficios que se obtendrán tras su consumo regular:
Contra el estreñimiento
Los problemas intestinales son muy frecuentes debido a la mala alimentación que se lleva hoy en día y al estrés al que las personas están sometidas. La miel actúa como un laxante delicado, promoviendo el movimiento natural de las heces y facilitando la acumulación de agua para mejorar su expulsión.
Para mejorar los problemas cutáneos
Especialmente en lo que concierne al acné, la miel es una excelente aliada. Esto se debe a que tiene una particularidad antimicrobiana que ejerce su función sobre la piel dañada y evita que lo que la afecta se reproduzca.
Para las alergias
A diferencia de lo que pueda pensarse por el contacto que realizan las abejas con el polen (que tiene altas propiedades alergénicas), la miel ayuda a regular los procesos alérgicos comunes en ciertas temporadas. Para ello, la recomendación es consumir una cucharadita diaria antes de que inicie la época de mayores alergias.
Como agente regulador del azúcar en la sangre
La miel está muy bien equilibrada en sus niveles de azúcares naturales: fructosa y glucosa. La fructosa es capaz de administrar los niveles de glucosa transfiriéndola al hígado, esto hace que se forme glucógeno que es muy útil en varias zonas del cuerpo. De esta forma, se mejora el funcionamiento de los sistemas y se eliminan los altos niveles de glucosa esparcidos por el organismo.
Para la resequedad
Como se mencionó anteriormente, la miel es utilizada en la fabricación de productos cosméticos. De esta forma, suele incluirse en jabones, cremas corporales o barras de labios. Si se desea utilizar de forma pura, aplicarla directamente sobre la piel áspera durante el baño da buenos resultados. También, puede usarse una pequeña porción sobre los labios y dejar que se seque, esto devolverá la humedad y movilidad a los mismos.
Dulces gracias a la miel
Además de todo lo mencionado anteriormente, la miel puede utilizarse como endulzante en algunas recetas de repostería. Esto ayuda a reducir el consumo excesivo de azúcar refinada obteniendo dulces muy exquisitos.
